ETERNA JUVENTUD

Eso es lo que parece estar viviendo la franquicia texana de San Antonio Spurs, con el big three más rentable de la última década, jugadores que sobrepasan las treintena de edad y que parece ser que los años que pasan no les afectan.
Les hablo del trio formado por Tim Duncan (Islas Vírgenes, 37 años), Tony Parker (Francia, 30 años, pero cumple 31 el 17 de Mayo) y Manu Ginobili (Argentina, 35 años), curioso que ninguno de los tres sea natural de Estados Unidos.
Ganaron su primer anillo juntos allá por el año 2003 y que desde entonces llevan dando lecciones de baloncesto al mundo entero. Su legendario entrenador, Greg Popovich, ha sabido manejarlos a la perfección y diseñar un sistema de juego único que se acoplase a sus jugadores en la disputa por elo campeonato, y vaya si ha cuajado el sistema, 4 títulos de la NBA (99, 03, 05, 07) le abalan. Son el equipo con mejor porcentajes de victorias de las finales de la NBA.

Parece que los tres jugadores han tomado un trago de la ficticia "fuente de la eterna juventud", porque no le veo otra explicación a semejante rendimiento después de los años que llevan trotando por la liga. Porque todos sabemos el esfuerzo y el sacrificio que requiere jugar en la mejor liga de baloncesto del planeta. 82 partidos en apenas 6 meses, con continuos desplazamientos por el país, idas y venidas, despegues y aterrizajes contínuos. De ahi que digan que el avión es la segunda casa para un jugador de la NBA, si es que se pasan el año viajando. También hay que decir, desde mi humilde opinión, que eso no puede catalogarse como "vida", pero es lo que hace diferente a la NBA, estos matices hacen que sea única.
Una plantilla joven que sirve de escudero para sus prestigiosas y veteranas estrellas, jugadores como Danny Green y el novato Kawhi Leonard, que cumplen perfectamente el papel que se les encomienda en cada partido. No se les ve futuro como superestrellas, quizás y ojalá que me equivoque, pero se han ganado su pequeño sitio en la liga y en uno de los mejores equipos de la NBA. Y se han ganado lo más importante para un jugador de baloncesto, la confianza de su entrenador.

El rendimiento de los Spurs viene forjándose a lo largo de la `Regular Season´, donde el gran balance (58-24)  que obtuvieron les hizo merecedores de la 2ª plaza de la conferencia Oeste. Haciendo del AT&T Center una auténtica fortaleza (35-6) y siendo temible a domicilio (29-16). Unos porcentajes impresionantes teniendo en cuenta todos los factores que rodean a la franquicia.
Pues cuando llegó la hora de la verdad, en los playoffs, también supieron dar la cara como siempre vienen haciendo. Eliminaron en primera ronda a unos mermados, pero no por ello débiles, LA Lakers sin Kobe Bryant. Una serie con mucho morbo debido a la continua rivalidad que siempre han tenido estas franqucias en los últimos años. Dieron un auténtico recital de juego y barrieron a la franquicia angelina en las primeras de cambio con un contundente de 4-0 en la eliminatoria.

Ahora, en esta semifinales de conferencia, parece que la cosa se les está complicando más. Pero estos jugadores están más que curtidos en este tipo de situaciones, porque uno se hace grande luchando, y la experiencia que tiene este equipo es mayor que la de niguún otro. Y los Spurs son unos luchadores. Pues con la serie empatada a uno, tocaba jugar el tercer partido en el Oracle Arena de Oakland (California), estadio de los Golden State Warriors.
San Antonio venció 102-92, recuperando así el factor cancha, con un auténtico recital de su base Tony Parker, MVP de la jornada con 32 puntos, y de su ala-pivot Tim Duncan, que cuajó un partidazo con un doble-doble de 23 puntos y 10 rebotes. Ahora lideran la serie 2-1 y tienen los ánimos de nuevo hasta arriba, y a unos motivados Spurs es dificil hacerles mella.
San Antonio hizo sus deberes y ganó el quinto partido en casa y se coloca 3-2 arriba en la serie. El sexto partido se jugará en el Oracle Arena. Los Warriors notaron demasiado los escasos 13 puntos que sumaron entre los Splash Brothers (Curry y Thompson). Fue la clave del partido.
Partidazo de nuevo de Harrison Barnes, que parece de todo menos novato. Volvió a sacar su madurez ofensiva con 25 puntos (10/18 TC) que no fue suficiente. El base francés Tony Parker hizo 25 puntos y repartió 10 asistencias.

El eterno tridente de San Antonio Spurs se coloca con 93 victorias en playoffs. Solo tienen por delante las 110 de aquel mágnifico tridente de los Lakers formado por Magic Johnson, Kareem Abdul-Jabbar y Cooper.
También hay que decir que con los 14 puntos y 11 rebotes en el quinto partido de la serie contra Golden State Warriors, Tim Duncan consiguió su doble-doble nº 143 en PO. Comparte con Wilt Chamberlain la 2ª plaza en la historia de los playoffs.
El tridente de los Spurs esta mayor sí, pero no por ello en sus últimas. Todos sabemos que les queda poco en la liga, pero ese tiempo lo están aprovechando, porque hasta que no llegue el momento de su retirada siempre van a ser firmes candidatos al título.

Bendita ETERNA JUVENTUD

Paco Florit (@FloritFlow)