"EL BALONCESTO ES MI REFUGIO, MI SANTUARIO. VUELVO A SER UN NIÑO EN EL PATIO. CUANDO LLEGO AQUÍ, TODO ES BUENO" KOBE BRYANT

jueves, 19 de septiembre de 2013

EL PIVOT DE CRISTAL

Al parecer el flamante y arriesgado fichaje de Cleveland Cavaliers, el pivot Andrew Bynum va a perderse el 'trainning camp' de su equipo. Situación que el propio equipo médico se temía y que al final ha sucedido.
Bynum no está listo para volver a las canchas, después de pasar un año en blanco en Philadelphia 76ers todo el mundo esperaba que ya estuviese recuperado.
Pero es la propia franquicia la que no quiere arriesgar con  su nuevo jugador, dicen que se vestirá la camiseta cuando esté listo al 100%. Ellos saben que era un fichaje arriesgado y lo que no quieren que ocurra es lo del curso pasado. Pagarle una barbaridad para que no juegue un minuto en toda una temporada. Un jugador que ha tenido unos problemas terribles con sus rodillas, que han cortado su proyección. Una apuesta arriesgada.
Pero Andrew, durante la pasada campaña ha creado bastante polémica, ya que se le ha visto jugando a los bolos e incluso bailando flamenco en un pub de Madrid. Y los propios fans de la franquicia de Pensylvania se han sentido engañados y defraudados por el comportamiento pasivo del jugador.
Este chico es un genio. Bynum dice odiar baloncesto. Hizo 17 millones dólares la temporada pasada sin hacer absolutamente nada. Se va a embolsar $ 6,000,000 garantizados con los Cavs (hasta dos años y $ 24 millones). Una máquina de hacer dinero sin mostrar su talento baloncestísitco.
La mayoría de los fans de los Sixers pensaban que iba a regresar durante la temporada, a finales, pero a regresar. Pero no lo hizo, una temporada sin un sólo minuto disputado y embolsándose 17 millones de dólares. Eso es efectividad, saber sacar el dinero de la nada.
Bynum puede ganar $ 41 millones en tres temporadas sin tener que poner un pie en la cancha. Es más de la mitad del camino (23 $ millones hasta ahora ha ganado).
Tras esta noticia, han vuelto a saltar las alarmas, ya empiezan algunos a esperarse lo peor, es decir, que Bynum nos entregue otro año en blanco.
De juego, porque de dinero no va a ser.
¿Veremos a Bynum vestirse la camiseta de los Cavs?

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