Parece mentira que ya hayan pasado cuatro años desde que el propio LeBron anunciará en la ESPN que dejaba Cleveland para jugar en el sur de Florida. Un auténtico golpe sobre la mesa y una decisión indigerible por parte de los aficionados de los Cavs. Que veían como su estrella se marchaba por la puerta de atrás dejando de lado un proyecto que había sido construido en base a él pero que no había dado los frutos esperados.
LeBron James dejó constancia en su escrito que jugará el próximo año en Cleveland Cavaliers, la que fue su casa durante siete temporadas, dejando atrás una época de cuatro años magníficos en Miami Heat.
Debe de ser difícil para los fans de los Heat ver como el que se ha convertido en el jugador franquicia durante la época dorada de su equipo se marcha dejando un solar sobre el que volver a construir algo similar será bastante complicado.
Lo que es innegable es que LeBron ha dado todo y más por este equipo y por ello no se le puede reprochar ni lo más mínimo. Su currículum en estos cuatro años no deja lugar a dudas, 4 finales y 2 campeonatos, que se dice pronto. Pero ha llegado el momento de continuar lo que un día empezó, aquella tarea que con sólo 17 años se le encomendó cuando únicamente era un mero plebeyo para verse luego convertido en 'Rey'.
Ha conseguido lo que se propuso, se marcó el objetivo de ganar un campeonato en Miami, y lo ha hecho por partida doble. Él mismo dijo que ese era el único motivo de su decisión, quería ganar a toda costa, y al juntarse con dos de sus amigos de promoción como Wade y Bosh el éxito estaba asegurado.
Ahora LeBron regresa a Cleveland en una versión mejorada, tanto como deportista como persona. Durante su estancia en Florida LeBron ha sabido alcanzar el punto de madurez del que carecía, convirtiéndole en lo que es a día de hoy, un profesional de los pies a la cabeza tanto dentro como fuera de las canchas.
Ha conseguido lo que se propuso, se marcó el objetivo de ganar un campeonato en Miami, y lo ha hecho por partida doble. Él mismo dijo que ese era el único motivo de su decisión, quería ganar a toda costa, y al juntarse con dos de sus amigos de promoción como Wade y Bosh el éxito estaba asegurado.
Ahora LeBron regresa a Cleveland en una versión mejorada, tanto como deportista como persona. Durante su estancia en Florida LeBron ha sabido alcanzar el punto de madurez del que carecía, convirtiéndole en lo que es a día de hoy, un profesional de los pies a la cabeza tanto dentro como fuera de las canchas.
En la misma carta se puede comprobar que la decisión de LeBron James está tomada y expuesta mayoritariamente desde una proyección extradeportiva, en el que los factores familiares y sus raíces han influido como nunca. Porque cuando el corazón manda, la cabeza se deja llevar por los sentimientos.
Tomen asiento y lean la profunda y detallada de reflexión de LeBron James:
"Antes de que nadie se preocupara por dónde jugaría al baloncesto, era un niño del noreste de Ohio. Es donde caminé. Es donde corrí. Es donde lloré. Es donde sangré. Tiene guardado un lugar especial en mi corazón. La gente me ha visto crecer allí. A veces siento que soy su hijo. Su pasión puede ser asfixiante. Pero me llama. Quiero darles esperanza cuando pueda. Quiero inspirarlos cuando pueda. Mi relación con el noreste de Ohio es más grande que el baloncesto. No me di cuenta hace cuatro años. Me doy cuenta ahora.
Os acordais cuando estaba sentado allá, en el Boys and Girls Club en 2010? [Cuando decidió dejar Cleveland]. Estaba pensando, esto es muy duro. Lo podía sentir. Estaba dejando algo en lo que había puesto mucho tiempo creando. Si pudiera hacerlo todo de nuevo, obviamente haría las cosas diferentes, pero aún así me hubiera ido. Miami, para mi, ha sido como la universidad. Estos últimos cuatro años me han ayudado a evolucionar en lo que soy. Me he vuelto un mejor jugador y un mejor hombre. He aprendido de una franquicia que ha ido donde yo quería ir. Siempre pensaré en Miami como mi segundo hogar. Sin las experiencias que tuve allí, no sería capaz de hacer lo que estoy haciendo hoy.
Fui a Miami por D-Wade y Chris Bosh. Hicimos sacrificios para mantener a Udonis Haslem. Me encantó ser un hermano de Mario Chalmers. Creí que podíamos hacer algo mágico todos juntos. Y eso es exactamente lo que hemos hecho! Lo más duro de dejar es lo que construí con esos tíos. He hablado con algunos de ellos y hablaré con otros. Nada cambiará lo que logramos. Somos hermanos de por vida. Quiero agradecer a Micky Arison y Pat Riley por darme unos increíbles cuatro años.
Estoy escribiendo este ensayo porque quiero una oportunidad de explicarme sin interrupciones. No quiero que nadie piense: “El y Spoelstra no se llevan bien. Él y Riley no se llevan bien, Los Heat no pudieron poner junto al equipo correcto” Eso no es verdad.
No voy a hacer una conferencia de prensa o una fiesta. Después de esto, es hora de ir a trabajar.
Cuando dejé Cleveland, tenía una misión. Iba en busca de títulos, y ganamos dos. Pero Miami ya conocía ese sentimiento. Nuestra ciudad no ha sentido eso en mucho, mucho tiempo. Mi meta sigue siendo ganar los máximos títulos posibles, sin duda. Pero lo que es más importante para mi es traer el trofeo de vuelta al noroeste de Ohio.
Siempre creí que volvería a Cleveland y acabaría mi carrera allí. Solo que no sabía cuando. Después de la temporada, ser agente libre no se cruzaba por mi cabeza. Pero tengo dos niños y mi mujer, Savannah, está embarazada. Empecé a pensar en como sería criar a mi familia en mi ciudad natal. Miré otros equipos, pero no iba a dejar Miami por ningún lugar excepto por Cleveland. Cuanto más tiempo pasaba, más me parecía lo correcto. Esto es lo que me hace feliz.
Para hacer esto necesitaba el apoyo de mi mujer y mi madre, que pueden ser muy duras a veces. La carta de Dan Gilbert, el estallido de los fans de Cleveland, las camisetas quemadas… ver todo eso era duro para ellas. Mis emociones estaban mezcladas. Era fácil decir “Vale, no quiero tratar con esas personas nunca más” Pero luego piensas de otra manera. ¿Y si fuera un niño que admirara a un atleta, y ese atleta me provocara querer ser mejor en mi vida, y entonces, se va? ¿Cómo reaccionaría? Me he reunido con Dan, cara a cara, de hombre a hombre. Lo hemos hablado. Todos cometemos fallos. He cometido fallos también.
No estoy prometiendo un campeonato. Se que es difícil de decir. No estamos preparados ahora mismo, que va. Por supuesto, quiero ganar el año que viene, pero soy realista. Será un proceso largo, mucho más largo de lo que fue en 2010. Pondré a prueba mi paciencia. Lo sé. Voy a estar en una situación con un equipo joven, con un entrenador nuevo. Yo seré el veterano. Pero cumpliré mi objetivo de reunir a un grupo y ayudarlos a llegar a sitios que no sabían que podían alcanzar. Me veo como un mentor y estoy impaciente por aportar talento a estos tios. Puedo ayudar a Irving a ser uno de los mejores bases de la liga. Creo que puedo elevar el nivel de Tristan Thompson y Dion Waiters. Y no puedo esperar a reunirme con Anderson Varejao, uno de mis compañeros favoritos.
Pero esto no es por la plantilla o el staff. Siento que todo esto va más allá del baloncesto. Tengo una responsabilidad, en muchos sentidos, y me estoy tomando esto muy en serio. Mi presencia puede marcar la diferencia en Miami, pero creo que puede significar mucho más en el lugar donde nací. Quiero que los chicos en Ohio, como los cientos de chicos de tercer curso de Akron que patrocino con mi fundación, se den cuenta de que no hay un lugar mejor para crecer. Tal vez alguno de ellos volverá tras la universidad para empezar una familia o crear un negocio. Eso me haría sonreir. Nuestra comunidad, que ha pasado por tanto, necesita todo el talento que le puedan dar.
En el noreste de Ohio no te regalan nada. Te tienes que ganar todo. Trabajas por lo que tienes.
Estoy preparado para ese desafío. Vuelvo a casa."
Os acordais cuando estaba sentado allá, en el Boys and Girls Club en 2010? [Cuando decidió dejar Cleveland]. Estaba pensando, esto es muy duro. Lo podía sentir. Estaba dejando algo en lo que había puesto mucho tiempo creando. Si pudiera hacerlo todo de nuevo, obviamente haría las cosas diferentes, pero aún así me hubiera ido. Miami, para mi, ha sido como la universidad. Estos últimos cuatro años me han ayudado a evolucionar en lo que soy. Me he vuelto un mejor jugador y un mejor hombre. He aprendido de una franquicia que ha ido donde yo quería ir. Siempre pensaré en Miami como mi segundo hogar. Sin las experiencias que tuve allí, no sería capaz de hacer lo que estoy haciendo hoy.
Fui a Miami por D-Wade y Chris Bosh. Hicimos sacrificios para mantener a Udonis Haslem. Me encantó ser un hermano de Mario Chalmers. Creí que podíamos hacer algo mágico todos juntos. Y eso es exactamente lo que hemos hecho! Lo más duro de dejar es lo que construí con esos tíos. He hablado con algunos de ellos y hablaré con otros. Nada cambiará lo que logramos. Somos hermanos de por vida. Quiero agradecer a Micky Arison y Pat Riley por darme unos increíbles cuatro años.
Estoy escribiendo este ensayo porque quiero una oportunidad de explicarme sin interrupciones. No quiero que nadie piense: “El y Spoelstra no se llevan bien. Él y Riley no se llevan bien, Los Heat no pudieron poner junto al equipo correcto” Eso no es verdad.
No voy a hacer una conferencia de prensa o una fiesta. Después de esto, es hora de ir a trabajar.
Cuando dejé Cleveland, tenía una misión. Iba en busca de títulos, y ganamos dos. Pero Miami ya conocía ese sentimiento. Nuestra ciudad no ha sentido eso en mucho, mucho tiempo. Mi meta sigue siendo ganar los máximos títulos posibles, sin duda. Pero lo que es más importante para mi es traer el trofeo de vuelta al noroeste de Ohio.
Siempre creí que volvería a Cleveland y acabaría mi carrera allí. Solo que no sabía cuando. Después de la temporada, ser agente libre no se cruzaba por mi cabeza. Pero tengo dos niños y mi mujer, Savannah, está embarazada. Empecé a pensar en como sería criar a mi familia en mi ciudad natal. Miré otros equipos, pero no iba a dejar Miami por ningún lugar excepto por Cleveland. Cuanto más tiempo pasaba, más me parecía lo correcto. Esto es lo que me hace feliz.
Para hacer esto necesitaba el apoyo de mi mujer y mi madre, que pueden ser muy duras a veces. La carta de Dan Gilbert, el estallido de los fans de Cleveland, las camisetas quemadas… ver todo eso era duro para ellas. Mis emociones estaban mezcladas. Era fácil decir “Vale, no quiero tratar con esas personas nunca más” Pero luego piensas de otra manera. ¿Y si fuera un niño que admirara a un atleta, y ese atleta me provocara querer ser mejor en mi vida, y entonces, se va? ¿Cómo reaccionaría? Me he reunido con Dan, cara a cara, de hombre a hombre. Lo hemos hablado. Todos cometemos fallos. He cometido fallos también.
No estoy prometiendo un campeonato. Se que es difícil de decir. No estamos preparados ahora mismo, que va. Por supuesto, quiero ganar el año que viene, pero soy realista. Será un proceso largo, mucho más largo de lo que fue en 2010. Pondré a prueba mi paciencia. Lo sé. Voy a estar en una situación con un equipo joven, con un entrenador nuevo. Yo seré el veterano. Pero cumpliré mi objetivo de reunir a un grupo y ayudarlos a llegar a sitios que no sabían que podían alcanzar. Me veo como un mentor y estoy impaciente por aportar talento a estos tios. Puedo ayudar a Irving a ser uno de los mejores bases de la liga. Creo que puedo elevar el nivel de Tristan Thompson y Dion Waiters. Y no puedo esperar a reunirme con Anderson Varejao, uno de mis compañeros favoritos.
Pero esto no es por la plantilla o el staff. Siento que todo esto va más allá del baloncesto. Tengo una responsabilidad, en muchos sentidos, y me estoy tomando esto muy en serio. Mi presencia puede marcar la diferencia en Miami, pero creo que puede significar mucho más en el lugar donde nací. Quiero que los chicos en Ohio, como los cientos de chicos de tercer curso de Akron que patrocino con mi fundación, se den cuenta de que no hay un lugar mejor para crecer. Tal vez alguno de ellos volverá tras la universidad para empezar una familia o crear un negocio. Eso me haría sonreir. Nuestra comunidad, que ha pasado por tanto, necesita todo el talento que le puedan dar.
En el noreste de Ohio no te regalan nada. Te tienes que ganar todo. Trabajas por lo que tienes.
Estoy preparado para ese desafío. Vuelvo a casa."
Quiero agradecer profundamente a Nico Patella, colaborador en la web de SoloTriples.com, que llevara a cabo la traducción de la carta. Mi más sincera enhorabuena por este trabajo. Un cordial saludo